El teléfono móvil se ha convertido en un objeto indispensable.
El avance tecnológico lo ha dotado de numerosas herramientas que facilitan la comunicación y la organización e incluso proporcionan ocio. En ocasiones, forma parte de nuestro material de trabajo implicando más de ocho horas de uso diario. Por ello, es importante observar ciertas pautas de uso para evitar que el teléfono móvil se convierta en un enemigo para nuestra salud.
Cuando utilizamos el teléfono móvil flexionamos el cuello para mirar la pantalla, sin pensar lo que eso implica para las articulaciones. Nuestra cabeza pesa entre 4 y 6 kg y genera peso adicional sobre la columna al aumentar la inclinación. Una flexión de cuello de 15° supone una presión de 12 kg sobre las vértebras lo que impacta directamente en la región lumbar. A medida que aumentamos el ángulo de flexión la presión se acrecienta, 30° implican 18 kg, 45° serían 22 kg y 60° equivaldrían al peso de llevar un niño a los hombros: 27 kg.
Soportar esos pesos durante periodos mantenidos de tiempo fatiga la musculatura cervical y dorsal. Esto puede desencadenar contracturas, cervicalgia, dorsalgia, dolores de cabeza, mareos y sensación de pesadez y hormigueo en miembros superiores.
La mejor manera de prevenir la aparición de estas patologías es:
- Flexionar el brazo para situar el móvil en nuestro campo visual, reduciendo así la inclinación del cuello.
- No permanecer mucho tiempo en la misma posición. Levantar la vista, mover el cuello o estirar impedirán la acumulación de tensión y evitarán la fatiga. Se recomienda descansar mínimo 10 minutos por cada hora de uso.
- Utilizar manos libres o auriculares siempre que sea posible.
- Realizar actividad física para tonificar la musculatura y mejorar la postura.
Otra patología que puede surgir a raíz del uso de teléfono móvil es el síndrome del túnel carpiano. Se trata de la compresión del nervio mediano en la muñeca por la posición de sujeción del móvil durante tiempo prolongado. Los síntomas habituales son entumecimiento, hormigueo, debilidad y dolor muscular en la mano y dedos.
Para prevenir esta patología conviene:
- Cambiar el móvil de mano si vamos a realizar un uso prolongado.
- Colocar el móvil en una superficie estable si no vamos a hacer uso del teclado.
- Utilizar auriculares en llamadas de teléfono prolongadas.
Tomar estas medidas evitará los inconvenientes que conlleva el uso del teléfono móvil para nuestro aparato locomotor, permitiendo disfrutar de la amplia variedad de posibilidades que ofrece la tecnología.
Algunas propuestas para mejorar tus hábitos de vida de mano de tu teléfono móvil son:
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Rastreadores de actividad.
Existen dispositivos para medir la actividad, por ejemplo las pulseras o relojes inteligentes, que se conectan con el teléfono móvil y registran tanto el movimiento realizado durante el día como la calidad de sueño durante la noche. También hay aplicaciones que miden la actividad siempre que lleves el móvil encima, permitiendo tener un registro aproximado. Se recomienda realizar entre 8.000 y 10.000 pasos diarios, el equivalente a 6-8 km.
Estas aplicaciones motivan a incrementar la actividad física, lo que impacta positivamente en nuestra salud.
Algunos ejemplos son, Endomondo, Runtastic, Google Fit o aplicaciones de salud incluidas en el dispositivo.
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Rutinas de ejercicios.
Realizar actividad física es la mejor solución para acabar con el dolor y los vicios posturales. Aquellas personas que no pueden realizar actividad física en un centro deportivo o que prefieren hacerlo por su cuenta, pueden consultar Youtube para encontrar la rutina que más se adapte a su condición física.
Algunos canales de Youtube con amplia variedad de rutinas de ejercicios son The Body Coach TV o GymVirtual. Si prefieres actividades cuerpo-mente como el yoga o el pilates son interesantes Xuan Lan Yoga o Aomm.tv.
Autora: Ester Caceres Romero