¿Qué es la ciática?
Llamamos comúnmente ciática a la irritación o compresión del nervio ciático en alguna zona de su recorrido. Este nervio es el más grande y largo del cuerpo humano y puede ser extremadamente irritable, sobre todo en su inicio ya que sus raíces salen de las vértebras lumbares. Además, es un nervio mixto, se encarga de dar sensibilidad y movimiento a la parte posterior de la pierna hasta llegar a los dedos del pie.
¿Por qué se produce?
Puede producirse por varios motivos dependiendo de la zona donde se produzca su compresión. Las causas más comunes son:
-Hernia o protusión: Entre las vértebras tenemos una especie de almohadilla para protegerlas, llamado disco intervertebral. Está formado por el núcleo (situado en el centro) y por el anillo fibroso (parte exterior). Algunas veces este disco se rompe o se desliza hacia fuera. Y aunque este proceso no es doloroso, sí que puede serlo la presión directa del disco sobre el nervio en su salida. En el caso de las protusiones, el anillo fibroso se deforma sin llegar a romperse, pinzando el nervio.
-Estenosis del canal vertebral: Es habitual en pacientes de más de 60 años y como su nombre indica es el estrechamiento del conducto de la médula espinal o raíces nerviosas debido a una degeneración.
-Ciática en el embarazo: Se suele producir en la segunda mitad del embarazo porque a partir de esta fase el útero puede crecer hasta 20 veces su tamaño. Esto nos lleva a colocar la cadera hacia delante para equilibrar el peso, atrapando el nervio al hacer esta basculación.
-En población adulta: Esta patología suele estar asociada a sobresfuerzos o movimientos bruscos, sobrepeso, accidentes traumáticos y posturas mantenidas como es estar sentado demasiado tiempo.
-El síndrome del piramidal o piriforme: El ciático pasa por debajo del músculo piramidal y en el 15% de la población este nervio cruza a través de las fibras musculares. Si el piramidal se acorta, lesiona o se inflama, provocará dolor parecido al de la ciática común, por eso se le conoce también como pseudociática. Puede ser debido a malas posturas, por sobreesfuerzos en la actividad física o por una mala biomecánica.
Síntomas
Los síntomas varían según el lugar donde se produce la irritación y pueden llegar a ser muy incapacitantes para quien los sufre, porque el dolor se convierte en un gran obstáculo a la hora de intentar llevar una vida normal. Se suele describir como un dolor sordo, punzante o sensación de ardor en la zona lumbar y/o en la parte posterior de la pierna, entumecimiento, hormigueo o falta de fuerza. Ante síntomas de este tipo acude a un especialista para que pueda confirmar el diagnóstico y orientar el tratamiento.
Recomendaciones para aliviar la ciática
Como ya hemos visto anteriormente, no todos los problemas de ciática son iguales, por lo que tampoco lo es su tratamiento y la forma de reducir los síntomas.
A la hora de dormir, lo ideal es que te tumbes boca arriba con una almohada debajo de las piernas para flexionar un poco la rodilla. Si sientes más alivio durmiendo de lado, coloca la almohada entre las piernas. Para sentarte debes colocar las piernas en ángulo de 90 grados con los pies bien apoyados en el suelo y puedes colocar una toalla enrollada en la zona lumbar.
El reposo absoluto sólo se recomienda como máximo 3 días, a partir de entonces debes comenzar a moverte progresivamente. Caminar durante 20-30 minutos puede ayudarte y es recomendable hacerlo dando pasos cortos.
Mantenerte activo con ejercicios de espalda si ya has sufrido episodios de ciáticas, es muy importante para evitar que ocurra de nuevo.
Autora : Nuria Feas (Fisioterapeuta colegiada)